El Milagro 1755

Milagro ocurrido en La Guardia en 1755, cuando la virgen del Rosario sudó sangre

“iendo los religiosos dominicos, a la tarde, a rezar el rosario a la Virgen del Rosario en su capilla, adbirtieron no quererse correr el velo. Lo hizieron a mano y bieron a la Virgen con el manto sobre el rostro y sudando. Alborotose la comunidad y todo el pueblo, y después todo el reyno. Diose quenta al señor obispo para hazer informazión del caso y ocupado en otras cosas no dio paso alguno. Se la hizieron a la Virgen grandes fiestas, fue toda la nobleza de Jaén y de toda la comarca a hazer fiestas y llebar a la Virgen muchos dones y alajas, y sonó tanto el prodigio que se dibulgó por toda España y fuera de ella.

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   Duró el sudor dos o tres días, y zesó manifestando la Señora su antiguo semblante (...).

            
En el día diez y ocho de febrero próximo siguiente del año 1756 adbirtieron al medio día sudar la misma Virgen como sangre. Fue un fraile a dar cuenta al señor provisor a Jaén (...) enjugó con unos paños el sudor y haziendo especulazión de él se adbirtió un zumo de granada, y sospechando al punto de un danzante que estava en el convento sirbiendo al sacristán, para hazer méritos para que diesen el ábito, mandose prender y luego al punto confesó averlo echo ambas veces para que la Virgen tubiese debozión”.

 (Archivos Parroquiales de Santa María de Torredonjimeno, Libro Primero Abecedario de Bautismos, fols. 153 y sigs.).